Que a Apple no le hace gracia el jailbreak es algo que ya sabemos desde hace tiempo. A través de actualización del firmware del iPhone la empresa ha ido modificando la versión del baseband, la parte del iPhone que se encarga de las comunicaciones, para dificultar la realización de este proceso y la activación del teléfono. Pero estos parches no solucionaban el verdadero problema que se usaba para acceder y cargar un firmware modificado.
Pero parece ser que ahora Apple ya está distribuyendo modelos de iPhone 3Gs que incorporan un nuevo bootrom que ya no es vulnerable al agujero de seguridad que se había encontrado hasta ahora en los terminales – el exploit 24kpwn – y con ello la carga de las modificaciones necesarias para el jailbreak.
Como lo confirma gente del iPhone Dev-Team, encargados del jailbreak, con los nuevos modelos es imposible realizar un jailbreak a día de hoy.
Para los usuarios que hayan adquirido uno de estos terminales y deseen realizar el jailbreak deberán estar atentos a las novedades que surjan en el blog oficial del iPhone Dev-Team, con esperanzas de que tarde o temprano se encuentre una nueva vulnerabilidad en el sistema que permita realizar de nuevo el proceso.